Una bomba de tiempo está instalada en el Boxing Club desde hace varios días, cuando varios casos de manejos de fondos se fueron acumulando hasta llegar a ser difíciles de ocultar para cualquier persona que intente averiguar la realidad económica del Boxing Club.Y mucho más difícil de ocultar es para Sorpresa y Media, que investigó acerca de diferentes subsidios que recibió el club con destino incierto, a lo que se sumó la gran cantidad de dinero que se leva recaudado por el alquiler de la cancha de césped.
Hace muy poco tiempo, este blog te contó sorbe la última mentira del presidente del club, Emilio Guatti, quien dijo que el club no recibió nunca un subsidio de la Municipalidad ni del Gobierno, cuando en realidad la Municipalidad subsidia el gas que consume el polideportivo (algo así como 50 mil pesos mensuales) y cuando el Gobierno le otorgó subsidios que van desde tres mil pesos como si el club fuera una ONG, hasta los 150 mil famosos que el Gobierno le otorgó al club para mantenimiento de la cancha de césped, que en realidad no necesita mantenimiento.
Alguien se “avivó” de eso dos meses después y le cambiaron la carátula a ese subsidio para cambiarlo por mejoramiento del complejo deportivo. Lo que hizo que la plata se terminara perdiendo sin tener un destino específico.
La historia se completó con los más de 80 mil pesos que el club lleva recaudados en concepto de alquiler de la cancha de césped, a un costo de 250 pesos la hora para la cancha completa y 150 para la mitad de cancha.
Semejante monto de dinero nunca llegó a utilizarse para premiar al los deportistas del club, tampoco para obras ni grandes refacciones.
Las averiguaciones que realizó Sorpresa y Media terminaron por apuntar a la tesorera del club, Etelvina Perales, quien es una de las acusadas por quienes conocen esta historia.
Al parecer, ella junto a su esposo "El loco" Cabrera y un par de integrantes de la Comisión Directiva tienen mucho que ver con que gran parte de ese dinero haya desaparecido de la faz de la tierra.
El dinero sigue ingresando al Boxing Club y así como entra desaparece para ir a parar a los bolsillos de unos pocos, mientras los jugadores y los profesores se ven notablemente perjudicados al no recibir apoyo económico para los proyectos que presentan. Una vergüenza que alguien algún día deberá parar. Por el momento, hay varias manos en una sola lata que está cada vez más vacía.
Sorpresa y Media tendrá más noticias para este boletín…
PD: En la foto observás a la tesorera del club, quien parece tener controlada a la perfección la situación para su beneficio personal.
