8 de mayo de 2008

El fútbol infantil para y necesita reorganizarse con urgencia

El departamento de fútbol infantil de la Liga Sur decidió que la temporada entre en receso invernal para cuidar a los más chiquitos del frío. Parece una oportunidad ideal para reorganizar el fútbol de los más pequeños que no atraviesa por un buen momento por la falta de equipos y nivel. Hay poca gente colaborando.


“Cosecharás tu siembra”, indica una frase histórica que tanto debería hacer reflexionar a todos los involucrados en el deporte de Santa Cruz.

A lo largo de su historia, han sido incontables los esfuerzos por conseguir un progreso sustentable para nuestra provincia deportivamente hablando, pero evidentemente también han sido incontables los errores.

En este caso, la referencia es para el fútbol infantil que ha ido decayendo en lugar de progresar para beneficio de los más chicos que no son más que el futuro del deporte más popular del país.

No es casualidad que Río Gallegos no consiga instalar a un equipo ni siquiera en las finales de un Torneo del Interior.

Tampoco es casualidad que el Torneo Argentino “B” hoy sólo sea un sueño por estos lados y que lejos haya quedado el recuerdo de la última participación de Bancruz en dicho torneo.

Nada es obra de la casualidad. En realidad, todo sea resume a esa vieja frase: “Cosecharás tu siembra”.

De un tiempo a esta parte, el fútbol infantil parece estar abandonado por gran parte del ambiente futbolístico, que parece no comprender la importancia de formar y acompañar como corresponde a los pequeños futbolistas que luego llegan a primera División sin contar con capacidades básicas para un futbolista de Primera División que pretende destacarse a nivel regional o nacional.

Miguel Ruffine, actual técnico de las inferiores del Boxing Club, es uno de los históricos formadores de talentos de nuestra ciudad y asegura que el fútbol infantil está en un pozo por el egoísmo que existe entre los técnicos que no logran reunirse para encontrar una solución al problema. “Hasta que no se reconocen los problemas, no se puede comenzar a solucionarlos”, y por ahí pasa la clave en este caso.

Mario Neira es el presidente del departamento de fútbol infantil de la Liga Sur y asegura que ese egoísmo es histórico y que fue el causante de que nada se haya logrado en las reuniones en las que se intentó trabajar para un mejor desarrollo del fútbol infantil.

¿La consecuencia? Una notable falta de padres y dirigentes trabajando, sumados a pocos y desunidos técnicos que al frente de los equipos, que cada vez son menos, como para completar el oscuro panorama.

Señores, en el medio están los chicos, los “pibes”, como los nombra el gobernador de la provincia, quien todavía no realizó ningún anuncio interesante para deportes en lo que va de su gestión.

Gente grande, ya es hora de reunirse y comenzar a reorganizar el fútbol infantil que pide a gritos un presente inmediato un poquito mejor. Para cosechar, primero hay que sembrar y las semillas por estos lados no aparecen…