Que la Subsecretaría de Recreación y Deportes es un fierro caliente no es novedad para nadie. Qué las críticas abundan tampoco es novedad y que tan mezcladas están las cosas que ya no se sabe que es cierto y que no, también. Por un lado, Pablo Perea y su gente intentan demostrar que los tres meses que llevan delante de la cartera de deportes serán fructíferos de cara a cuatro años de gestión.
Del otro, se suman críticas de parte de quienes no comparten sus ideas como subsecretario, y de parte de quienes, evidentemente, no le tienen mucho cariño desde su época como presidente de la Liga de Fútbol Sur.
Por pronto, van tres meses de gestión con mucho para analizar. De las buenas y de las malas.
Entre esas cosas, las renuncias de tres integrantes del grupo inicial de trabajo.
Primero fue el director del Director General de Albergues y Plantas Estables, Adolfo Cid, y luego lo siguieron Iván Cepernich Y Jorge Whioff, ambos importantes en el proceso de la Subsecretaría, sobre todo Whioff, quien coordinaba el proceso de los Juegos Evade y Araucanía, además de las becas provinciales.
Ellos no habrían estado de acuerdo con el trabajo que realizan los directores provinciales designados por Perea (Salazar y Collantes) y eso hizo que presenten su renuncia.
En Principio, el lugar de Jorge Whioff será ocupado por Marcelo Ojeda, hombre hasta entonces relacionado con el Hispano Americano.
